Envidia
Hoy pienso en la envidia. La envidia que nos ciega, la envidia que emborrona el mundo, la envidia que mata personas, la envidia que nos hace mentir, la envidia que nos hace desear el mal ajeno, la que no nos lleva a nada, la envidia mala.
Llego a pensar si no es un símbolo de inmadurez, una niñería, algo de lo que uno se arrepiente en la posteridad. También pienso que si sólo de inmadurez se tratase no llegaría a los extremos a los que se llega hoy día por la envidia no sana. Yo creo que también interviene la maldad, la mala sangre muchas veces en el sentimiento de envidia.
Complejo de inferioridad que en vez de fomentar un afán de superación, una especie de pique, una "competición", o nos haga felices si pensamos en el contrario; nos lleva a desear el mal ajeno, mentir o difamar, intentar fastidiar, o hacer la vida más difícil a el que podría ser nuestro modelo a seguir. Y francamente...es absurdo, no lleva a absolutamente nada.
Yo también he sentido envidia, claro que sí, como la mayoría de las personas de la tierra. Envidia de alguien que en algo es superior a mí, que tiene algo que yo no. Por supuesto, pero creo que nunca me ha llevado a nada malo: me ha motivado, me ha sido útil el pique, o me ha llevado a decir un :"me das muchísima envidia...sana ¿eh?" /"que suerte"/"me alegro por tí"...
Por eso creo que el que busca el mal ajeno, difama a la persona, y otro largo etcétera; solo nos está mostrando su inmadurez, y demostrándonos de esa manera que admira nuestra virtud, nuestra posesión, o nuestro trabajo. Está claro que no todos somos iguales: siempre habrá gente con cualidades para cosas en las que seas nulo, gente más guapa que nosotros, más inteligente, o con un mejor carácter...Pero también está claro que el que no aprovecha sus puntos fuertes y los trabaja y fomenta es porque no quiere.
Así que a partir de ahora reflexionemos un poquito, aprendamos a alegrarnos por los demás y ser felices con lo nuestro, y dejemos de ser tan críos y tontos a veces.
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